Muchas personas, sobre todo los hombres y más si son jóvenes, presumen dormir poco y en ocasiones hasta de no dormir bien, sin darse cuenta que no reposar bien y como se debe a la larga podría traerles graves consecuencias como las que aquí te mencionamos y para las que te traemos los mejores tips y consejos para prevenirlas.
Al igual que tener una dieta sana y hacer ejercicio, para llevar una vida plena y saludable es indispensable descansar como se debe pues no dormir bien nos puede acarrear a la larga graves y severas consecuencias físicas y sicológicas, además de que reduce nuestra esperanza de vida, mientras que a corto plazo y de manera inevitable y casi inmediata nos provocaría trastornos de ansiedad y depresión, además de problemas de memoria.
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De tal modo y si no quieres sufrir consecuencias en tu rendimiento escolar, laboral y social, por más superhombre o supermujer que te sientas lo cierto es que nadie es inmune a no dormir bien, tanto así que la falta de sueño es utilizada como tortura, pero de la que padece hasta 30 por ciento de la gente ya sea por insomnio o apnea del sueño. De ahí la importancia de tener una buena higiene del sueño, ya que este no se recupera por más horas de siesta que tengamos o por levantarnos más tarde.
Tips y consejos para dormir bien y no sufrir la falta de sueño
De hecho, el no dormir bien o no descansar es la principal razón por las que muchas personas van al doctor, afectando incluso a dos de cuatro que duermen menos y por lo mismo sufren consecuencias como torpeza mental, falta de concentración y déficit de atención, cometiendo más errores que quienes descansan adecuadamente y sufriendo todo tipo de dolencias, que van desde la obesidad hasta enfermedades cardiovasculares.
Los bebés requieren entre 12 y 14 horas de sueño, los menores de tres años entre 10 y 12, los adolescentes y adultos entre 7 y 8 y las personas de la tercera edad con cinco horas es suficiente, pues las necesidades de dormir disminuyen., por lo que si tú no estás en esos rangos te recomendamos utilizar la cama sólo para dormir y no para hacer otras actividades. Si aun así no puedes dormir, sal de la cama e incluso del cuarto pues tu cerebro aprende que en la cama se está despierto.
No tomes alcohol, bebidas energéticas o con cafeína; no te acuestes a diferentes horas, con las luces encendidas ni tampoco hagas ejercicio pues cuando uno se va a dormir se produce un descenso de la temperatura corporal, lo que facilita el sueño, pero si haces deporte por la noche tu temperatura corporal aumentará y te costará trabajo dormir.
EG