Las primeras vacaciones del año están muy cerca y, con ello, millones de personas están a marchas forzadas para lograr sus objetivos en la báscula. Sin embargo, muchos de ellos realizan un gran esfuerzo para bajar de peso pero no les es posible, si eres uno de ellos te decimos por qué pasa y qué hacer al respecto.
Mantener una figura delgada se toma muchas veces como un sinónimo de buena salud y felicidad al no tener kilitos de más, pero incluso aquellos que son sumamente delgados pueden padecer varias enfermedades por lo que es recomendable acudir con un especialista para que éste te diga cuál es la mejor forma de cuidarte.
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En ese sentido, en internet existen dietas y rutinas que parecen ser ideales para experimentar una pronta pérdida de peso, no obstante, es importante que conozcas bien tu tipo de cuerpo pues hacer los movimientos equivocados o comer algo que no le cae bien a tu organismo podría generar es ineficiencia y frustración.
¿Qué hacer si me esfuerzo mucho y no logro bajar de peso?
Lo ideal es ir con el nutriólogo y doctor en general para que analicen si existe alguna razón médica que te impida llegar a tu talla ideal, además de que debes dejar de compararte pues los procesos de cada uno son diferentes y aquí influye hasta la genética de las personas, pero te decimos algunos aspectos por los que no podrías estar bajando de peso.
No dormir bien
Aunque varios entrenadores aseguran que descansar es para flojos, la realidad es que es parte fundamental para el buen funcionamiento de tu cuerpo, por lo que debes dormir lo suficiente para que te recuperes de toda la actividad que realizas durante el día. Lo ideal sería dormir entre siete y nueve horas cada noche ya que de lo contrario podrías incrementar la hormona cortisol (mejor conocida como del estrés) y afectará directamente en la poca pérdida.
No comer adecuadamente
Pese a que el mito ha ido quedando atrás a lo largo de los años, aún existen personas que creen que dejando de comer es la mejor solución para bajar de peso, pero no hay nada más alejado de la realidad. Pues al dejar a tu organismo sin fuente de energía éste comienza a ahorrar todo lo que pueda y genera que tu metabolismo se haga muy lento, lo que eventualmente genera el famoso rebote.
Beber agua insuficiente
Contrario al punto anterior, tomar mucha agua te ayudará a mejorar el ritmo de tu metabolismo, también aprovecharás más la energía de los alimentos y reduces el hambre excesiva producto de la ansiedad, solo recuerda no excederte pues podría traerte problemas peores.
Medicamentos
Si bien es necesario consultarlo con un médico especialista, sustancias como antidepresivos, anticonceptivos o tratamientos para diabétes u otras enfermedades podrían ser los que te impidan bajar de peso por más esfuerzo que le pongas a tus entrenamientos.