¡Para tener en cuenta! En el ejercicio constante es una de las claves para prevenir enfermedades a mediano o largo plazo, principalmente relacionadas con el corazón, los huesos y los músculos, así que esta vez te traemos 5 movimientos básicos de taichí para adultos mayores.
De acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2021 solo el 39.6% de la población mayor de 18 años se consideraba físicamente activa y el promedio más bajo estaba en el rango de edad de 45 a 54 años con 31.6% en hombres y 28% en mujeres, de ahí la relevancia de esta información.
Te podría interesar
Es por ello que resulta buena alternativa pensar en algo diferente, que nos mantenga motivados o entretenidos y el taichí aparece en el horizonte como un arte marcial de tradición oriental que, en esencia, es denominado como meditación en movimiento porque busca trabajar con el cuerpo y la mente.
Entre los principales beneficios de esta disciplina se encuentran mejorar la postura, la confianza y el manejo de las emociones, así como reducir el envejecimiento, disminuir el estrés y mejorar la movilidad de algunas articulaciones.
Foto: Especial
Mejores movimientos de taichí para adultos mayores
Ahora bien, no es un secreto que con el paso de los años los huesos y los músculos se desgastan, por lo que nuestra primera misión será acudir con un médico de cabecera para saber si estamos en condiciones de entrenar taichí o no.
Asimismo, la alimentación jugará un papel fundamental en el cuidado de la salud a lo largo de la vida, por lo que se recomienda acudir con un experto en la materia para que elabore un plan en función de nuestras necesidades; dicho lo anterior, es momento de enlistar 5 movimientos básicos de taichí para adultos mayores:
- Calentamiento. En sí, este ejercicios promueve el relajamiento, podemos hacer aflojamiento de cintura parados con los pies en el suelo un poco más anchos que la cadera, ponemos los brazos a los lados, giramos hacia la derecha e izquierda mientras los brazos cuelgan; repetimos 1-2 minutos.
- Toca el cielo. Sincroniza la respiración y el movimiento, bastará con sentarse en una silla, poner las manos en el regazo con las palmas hacia arriba; a medida que inhaamos, levantamos las manos al nivel del pecho, giramos las palmas hacia afuera y levantamos las manos por encima de la cabeza. Cuando exhalamos, relajamos los brazos y los bajamos y repetimos 10 veces.
- Molino de viento. Promueve la flexibilidad, hay que pararse con los pies ligeramente más anchos que el ancho de los hombros, relajamos los hombros y dejamos colgar los brazos para después llevar las manos enfrente del cuerpo apuntando hacia el piso. Inhalamos, levantamos los brazos hacia el centro del cuerpo y luego a la cabeza. Posteriormente, nos estiramos hacia el techo, nos arqueamos hacia atrás, doblamos la espalda hacia el suelo y al final nos inclinamos hacia adelante desde la cadera.
- Mano. Nos paramos con los pies más anchos que el ancho de los hombros, levantamos los brazos hacia afuera, flexionamos las manos, después giramos las muñecas.
- León sacude su melena. Nos sentmos en una silla con las manos en los muslos, inhalamos y exhalamos, sentiremos estiramiento en la parte baja de la espalda si nos inclinamos hacia adelante, en ese momento giramos los hombros hacia un lado para que la cabeza y el cuello giren también.