Si eres una de las personas que hace ejercicio y no es un pecado que de vez en cuando se te antoje una copita de alcohol, puesto que hasta los deportistas de alto rendimiento lo hacen, pero ¿cómo es que las bebidas embriagantes afectan a tu rendimiento y salud?
Las bebidas embriagantes son una de las drogas legales que más consumen las personas en todo el mundo; ya sean jóvenes, personas adultas, hombres, mujeres, deportistas y no deportistas.
Te podría interesar
Desde hace varios años atrás, la incógnita de cómo afecta el alcohol en el ejercicio ha estado latente. Los estragos más comunes son que puede afectar directamente en temas metabólicos, cardiovasculares, termorreguladoras y neuromusculares, los cuales tienen consecuencias negativas en nuestro rendimiento a la hora de entrenar.
¿Cómo me afecta alcohol cuando hago ejercicio y en mi salud?
La manera en que algunas copas de más pueden afectar tu rendimiento del ejercicio cuando entrenas son varias. Primero se debe tomar en cuenta el tipo y la dosis de la cerveza, whisky, o cualquier tipo, así como la administración y los efectos agudos y crónicos.
Ten en cuenta que no todos los cuerpo digieren mejor las bebidas alcohólicas, ya que existen personas que pueden aguantar muchas copas de estas sin ponerse borrachas, así como la edad. No es lo mismo una cruda a los 20 años que a los 40.
Recuerda que el alcohol proporciona energía, 7kcal por gramo. Es necesario que estas bebidas no son utilizadas como fuente de energía, así que estas kilocalorías son vacías y no provén ningún nutrientes.
El hígado es el sitio principal de la oxidación de las bebidas alcohólicas, este influye de manera directa en el metabolismo de los carbohidratos y las grasas, además desplaza los dos macronutrientes como fuentes de energía. Esto quiere decir que tus chelitas o cubas en exceso detienen el metabolismo de los carbohidratos y las grasas.
La ingesta constante de estas, puede comprometer un suministro adecuado de combustible para la producción de energía normal, reduciendo el glucógeno muscular y disminuye la captación de glucosa en los músculos.
Si bebes mucho, esto hará que se afecte la capacidad de trabajo muscular y además tu rendimiento en general se deteriorará, si es que corres, nadas o haces bicicleta. Además tu regulación de la temperatura se verá perjudicada y cuando entrenes la fatiga aparecerá más rápido.
CA