Hacer deporte trae consigo muchos beneficios para nuestra vida y salud, pero no hacerlo podría derivar en varios problemas que, además de poner en riesgo tu salud, podrían tener en vilo hasta tu vida. Aquí te decimos lo qué pasa si no haces absolutamente nada de ejercicio.
Gabriela Retana, la nutricionista del equipo de futbol español Real Sociedad, explica que una persona sedentaria es la que da menos de 5 mil pasos diarios y que si no haces nada de ejercicio mata tanto como el tabaco, por lo que la práctica deportiva ayuda a controlar los niveles de glucemia en sangre y a prevenir las enfermedades cardiovasculares.
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Algo de ejercicio siempre será mejor que nada y entre más deporte se haga es mejor, aunque un exceso de actividad física o practicarla de forma muy extrema puede ser igual de malo. La clave es hacer ejercicio moderadamente, por lo menos cinco días semanales, en periodos de 45 minutos diarios aunque no sean seguidos, si no a lo largo de la jornada.
La experta asegura que hacer ejercicio no se trata de ponerse a correr o comprarse una bicicleta de montaña, pues caminar es una actividad física apta y sencilla para cualquiera, con el aliciente de que podemos hacerlo sin planificarlo y sin sentir que le hemos destinado tiempo al deporte.
¿Qué pasa si no hago nada de ejercicio?
Si no haces nada de ejercicio repercute en nuestra salud y podría poner en riesgo nuestra vida, pues puede generar la aparición de cáncer, problemas de infertilidad, diabetes y hasta conducirnos a una muerte prematura.
Fernando Sartorius, entrenador personal de famosos como Elsa Pataky y autor del libro Desafío Max (Esfera de los Libros), afirma que para alcanzar el punto máximo de la salud se requiere tener bajos niveles de grasa en el cuerpo, disfrutar de tus platos favoritos siguiendo la fórmula “80/20” (80 por ciento de comida sana y 20 por ciento para anotojitos), que en tu cabeza se produzcan más cambios sicológicos que físicos y recuperarse antes de las enfermedades.
Ante ello, asegura que hay que crear hábito de hacer ejercicio y ser constante, pues se trata de un proceso que requiere compromiso para obtener resultados y combatir enfermedades como la obesidad o la diabetes, entre muchas otras.
A los adultos se les recomienda mantener una dieta equilibrada que incluya lácteos, frutas y verduras para evitar la obesidad y mantener una buena postura, mientras que los niños menores de cinco años deberían hacer unos 180 minutos al día de actividad física; entre 5 y 17 años 60 minutos diarios; de 17 a 65 años unos 75 minutos semanales y a los mayores de 65, tres veces a la semana para fortalecer los músculos.
EG