Los atletas que son catalogados como constantes en la actividad física, tiene una dieta saludable, descansan y cuidan más que nada su alimentación, pero ¿qué pasa si hacen ejercicio después de tomar alcohol?
De acuerdo con los expertos y médicos, la verdad es que beber alcohol y entrenar no es del todo recomendable. Esto se debe a todo lo que las bebidas etílicas le hacen a nuestro cuerpo y a nuestro cerebro.
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Lo que sí se puede hacer es tomarte unas copas con moderación y combinarlas con agua, por ejemplo si estás bebiendo cubas, puedes tomarte una botella de 500 mililitros cada dos vasos de estos tragos.
¿Qué le pasa a mi cuerpo si tomo alcohol y después entreno?
De acuerdo con Jhon Hawley quien es un investigador de la Australian Catholic University, comentó que el alcohol perjudica la síntesis de las proteínas, las cuales aumentan el tamaño muscular y la preparación de los músculos.
Los tragos de etanol con refresco puede limitar la capacidad de los músculos para absorber la glucosa, la sustancia que proporciona energía, donde se pierden menos calorías. Cabe señalar que también de deteriora las habilidades motoras e incluso podría ser peligroso con el uso de maquinaria deportiva, por ejemplo las pesas, y aparatos del gimnasio como las caminadoras y la elíptica.
Recuerda que el consumo excesivo de alcohol causa una disfunción aguda y crónica del cerebro, produciendo trastorno en el sistema nervioso central, presentando alteraciones en la memoria y en las funciones intelectuales como cálculo comprensión y aprendizaje.
CA