Suele ser un tiempo normal cuano se tiene mucho trabajo, la atención puesta en un proyecto, se vive de nuevo la soltería tras una relación o simplemente por no tener ganas de estar con alguien. Por ello 30 días parece ser suficiente para que no se enciendan las alarmas, sin embargo llega a haber implicaciones. Entonces, ¿qué pasa si no tengo relaciones durante un mes?
Aunque después de este tiempo tampoco habrá muchas cosas qué temer, como cuestiones cardiacas o temas psicológicos graves, sí es un periodo en el que ya hay cambios perceptibles para quien está en abstinencia, como para los demás. Un día a la semana es suficiente, según expertos, para tener relaciones. Pero si no lo hay, se notan cambios desde la segunda semana.
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¿Qué pasa si NO tengo relaciones en un mes?
Durante este periodo de abstitencia, sea por decisión propia o por circunstancias diversas, muchas personas pueden experimentar efectos negativos a nivel físico o psicológico, por lo que es recomendable visitar al médico en caso de notar algún tipo de afectaciones como las que ahora mismo enlistamos, sobre todo porque cada persona es diferente a otra, y el tratamiento o la forma de acompañar el proceso es diferente en cada caso.
Aumento de peso
Además de tratarse de una actividad donde el cuerpo entra en acción y permite acelerar el ritmo cardiaco, trabajar los músculos y quemar calorías, al no tener pareja o alguien con quien mostrarse desnudo puede provocar que no se tenga un buen cuidado de la apariencia, no se mida lo que se come y se dejen pasar rutinas de ejercicio.
Baja autoestima
Tiene que ver con el punto anterior, pues de manera mental nos encontramos con que no somos deseados, o al menos no nos lo dicen, como sí pudiera suceder en una relación íntima. Esto también pega en el autoestima y, aunado al cambio físico que podemos notar, se verá ese golpe en cómo nos sentimos.
Timidez
Se dará sobre todo al mostrarse nuevamente en una relación con alguien, pero incluso al hablar con alguien que no se conoce, suele verse cohibido quien no tiene relaciones, pues éstas brindan seguridad y en el acto se segregan sustancias que ayudan a tener un mejor estado de ánimo. Por eso cuando estamos en una relación de pareja solemos sentirnos más atractivos.
Poca aceptación
Por la cabeza pueden pasar muchas cosas, pero una de ellas es culparse o responsabilizarse por no tener relaciones, ya sea por el cuerpo, la forma de ser, la mentalidad, la seguridad o baja autoestima. Lo que se hace es buscar razones y se suelen buscar más en uno mismo.
Niveles de estrés altos
Al no liberar oxcitocina, no hay muchas maneras de dejar de sentir estrés o presión, aunque sí existen, como en el caso del baile o la risa. Sin embargo, nada se compara con el nivel de satisfacción a la hora de tener relaciones, pues el disfrute lleva a otro nivel ese momento.
Apariencia distinta
Desde la piel más lisa, sin imperfecciones o más radiante, hasta el estado de ánimo y la simple postura diaria se pueden ver reflejados cuando se tienen relaciones, pero si no, precisamente es más fácil irse al lado contrario.