Como nuestros efectivos casi siempre son estéticos, enfocamos nuestro entrenamiento al fortalecimiento de torso, brazos y piernas, sin darnos cuenta que hay otras zonas como los talones que son indispensables para nuestro desempeño deportivo o de entrenamiento y que nos pueden traer grandes beneficios. Aquí te decimos qué pasa si entrenas los talones todos los días.
Si bien es cierto que entre los fisicoculturistas trabajar todos los días las zonas del cuerpo, incluidos los talones, es esencial para mantener un equilibrio en su desarrollo corporal, también lo es que para muchos deportistas o personas normales no lo es tanto, pues mientras logren los objetivos estéticos que buscan es suficiente.
Te podría interesar
De tal modo, hay ciertos grupos musculares que dejan al olvido, pero que son fundamentales en nuestro desempeño físico y para no tener lesiones graves, por lo que es imprescindible trabajarlos a conciencia para mejorar el tronco inferior, nuestra potencia física y así poder hacer lo mejor posible nuestras rutinas. Entérate qué pasa si entrenas los talones todos los días.
Esto pasa si entrenas talones todos los días
Si entrenas al elevar los talones todos los días traerás grandes beneficios al grupo muscular de las piernas, específicamente a los gemelos, que son aquellos que aportan el impulso de arranque y explosividad a nuestras extremidades inferiores y que por lo general dejamos un poco olvidados a la hora de hacer ejercicio.
No obstante y si los entrenas de manera correcta diariamente, si eres corredor fortalecerás la musculatura del gemelo y generarás resistencia, explosividad y mayor equilibrio en ambas piernas, dándole gran potencia a tu zancada, además de protegerte de muchas otras lesiones.
La manera correcta para fortalecer los músculos de los talones es con un escalón o plataforma resistente que nos permita subir y bajar, haciendo el ejercicio con comodidad y movimientos lentos y concentrados en dicha zona del cuerpo. De inicio se recomienda hacerlo con tu propio peso como resistencia y en ejercicios de equilibrio para ambas piernas por igual.
Ponte de pie delante del escalón o plataforma, con el cuerpo bien recto e intentando involucrar los músculos del torso al retraer las costillas superiores. Tus puntas de los pies deben estar bien plantadas, mientras que los talones deberás ponerlos en el borde para luego subirlos y dejar todo tu peso en equilibrio sobre tus dedos durante unos tres o cuatro segundos, para luego bajarlos hasta que estén por debajo de la plataforma. Haz unas 15 o 20 repeticiones en dos o tres sesiones consecutivas, con 20 o 30 segundos de descanso entre una y otra.
EG