Los cachetes son uno de los rasgos faciales contra los que muchas personas luchan, sometiéndose a tratamientos y cirugías, pero también existen ejercicios para reducirlos, eliminar la grasa y adelgazar tu cara sin bichectomía. Aquí te decimos cómo.
La grasa puede acumularse en los lugares menos esperados como en los cachetes, de donde también resulta difícil de eliminar pues hay personas que tienden a acumularla más en esta zona que otras.
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La grasa cumple una función biológica, pero nuestra genética también lleva a que se acumule en mayor medida en áreas como las mejillas, donde el exceso de peso puede influir en que sean más evidentes y hacer la piel flácida.
Todos tenemos en las mejillas las llamadas bolas de Bichat o bolsa de grasa bucal, ubicadas entre dos músculos en la parte media de los cachetes. Su función es lubricar los músculos en la masticación y apoyar la mejilla de los recién nacidos durante la lactancia y su tamaño no tiene mucha correlación con tu grado de adiposidad, además de no ser muy sensibles a la pérdida de peso.
Algunas personas pueden tenerlas más aumentadas o evidentes por sus características del rostro, por lo que optan por la bichectomía, una cirugía para reseccionar estas bolas y afinar los cachetes, aunque siempre debe hacerse con un especialista.
Ejercicios para eliminar cachetes, grasa y adelgazar la cara
La causa de los cachetes son el sobrepeso; falta de nutrientes; alto consumo de sal, azúcar y carbohidratos; retención de agua por una mala elección de dieta y deshidratación; impotencia y altos niveles de estrés, así como factores genéticos.
Para reducirlos, toma aire por la boca y mantenlo por 10 segundos, lo que te ayudará a que los músculos se tensen. Luego, mueve la boca hacia la derecha y hacia la izquierda 10 veces, para después estirar los labios 10 veces, como si estuvieras dando un beso.
A continuación, chupa tus mejillas durante 10 segundos, inhala y exhala aire lentamente cinco veces y, finalmente, mantén los labios adentro de la boca y ábrela y ciérrala durante 10 segundos.
Luego pasarás al masaje facial: con el dedo índice y medio presiona la zona de los cachetes una y otra vez, pasando también por los costados de la nariz. Luego, con ambas manos, frota el área del cuello y la papada de arriba hacia abajo.
Con ambas palmas, frota tus cachetes de abajo hacia arriba de manera alternada, primero de un lado y luego del otro durante 10 segundos, luego frota tu barbilla con ambas manos hacia arriba y los lados para despejar la mandíbula.
Masajea todas tus cachetes con los dedos índice y medio de ambas manos, para luego doblar los índices y estirar la piel de los pómulos de adelante hacia atrás 10 veces. Frota tu cuello de arriba hacia abajo con ambas manos por cinco segundos, primero de un costado y luego del otro.
Antes de empezar, que no se te olvide lavar tu rostro y manos, además de agregar un hidratante facial. Haz esto todos los días y en dos semanas comenzarás a ver resultados.
EG